Todos los veranos hacemos un viaje la familia al completo. Para decidir dónde ir tenemos en cuenta las siguientes variables:

– Proximidad. Buscamos destinos que estén a 4,5 horas máximo (al menos de momento, hasta que el peque sea más mayor)

– Opciones de disfrute para toda la familia. Vamos a conocer otros lugares, siempre buscando que tengan cosas que les puedan gustar también a los peques.

– Buscamos que tenga Bus turístico, aunque no es indispensable, pero para nosotros es un punto pues es una forma de ver la ciudad al completo decidiendo después que queremos ver en detalle.

Dicho esto, hace dos veranos estuvimos visitando Toledo. Encontramos un piso en el casco antiguo, muy céntrico. Como ya os conté en el post Viajar con niños, cuando viajamos los 5 buscamos vivienda completa a través de Airbnb. Estábamos cerca de todo, incluso de la salida del Bus Turístico.

La tarde que llegamos aprovechamos para ubicarnos y ver la Catedral.

Uno de los días disfrutamos de la tirolina urbana más larga de Europa que cruza el río Tajo, con un recorrido de 180 metros y un desnivel del 6% apto para todos…a los peques les encantó! Bueno y a nosotros también 😊

Visitamos el Alcázar y el Museo del Ejército, que se encuentran en el mismo edificio. Tenía exposiciones muy chulas llenas de historia y mucha representación militar histórica.

Por las tardes aprovechamos para ver diferentes exposiciones, que nos resultaron muy interesantes y nos gustaron a todos. La exposición de las catapultas era interesante, así como la de los templarios, la que era un poco más heavy era la de los instrumentos de tortura, pero tampoco demasiado…al final, por suerte o por desgracia es parte de nuestra historia y la verdad que estaba montada de forma que era apta para todos los públicos.

También aprovechamos para ver artesanía típica toledana, así como realizar algunas compras típicas, como por supuesto algunos dulces 😁

Así que en definitiva disfrutamos mucho de Toledo y es un viaje que seguro repetiremos cuando el peque sea más mayor y pueda tirarse por la tirolina 😉

¿Conocéis Toledo?

Hoy os dejo una receta que vimos en el IG de Realfooding y nos gustó mucho, aunque nosotros la adaptamos a los ingredientes que teníamos en casa, así que en lugar de manzana utilizamos pera y el resultado es estupendo.

Es un bizcocho fácil de preparar, saludable y con un sabor sorprendente, así que…¿que más se puede pedir?

Esta vez lo prepararon Noah y el papi, que les encanta cocinar juntos y como no, el primero en probarlo fue el peque, costó que esperara a que se enfriase del todo 🙂

Viendo lo agusto que se lo estaba comiendo nos dio envidia y lo probamos todos antes de cenar y la verdad que está buenísimo.

Ingredientes:

3 peras

4 huevos L

50 gr de pasas

1 yogur griego

1 medida* de leche de almendras *(medida del vaso del yogur)

1 medida* de AOVE

3 medidas* de harina de espelta integral

1 sobre de levadura

50 gr de pepitas de chocolate

1 cs de crema de cacahuete.

Preparación:

  • Ponemos las pasas a remojo unos 10 minutos.
  • Pasado este tiempo escurrimos y trituramos junto con los huevos.
  • Añadimos el yogur, el aove, la crema de cacahuete, la levadura y la harina. Mientras vamos añadiendo cada ingrediente no dejamos de batir.
  • Por último añadimos 2 peras peladas y laminadas y las pepitas de chocolate y mezclamos bien.
  • Precalentamos el horno a 170º calor arriba y abajo.
  • Forramos el molde que vayamos a utilizar con papel de horno. Vertemos la mezcla en el molde y ponemos rodajas de pera encima.
  • Introducimos el molde en el horno unos 40-45 minutos, hasta que pinchemos con un palillo y este salga limpio.
  • Sacar del molde y dejar enfriar sobre una rejilla.

Esperar a que se enfríe y a disfrutar!! 😋